En el mundo laboral actual, muchas personas sueñan con dejar sus trabajos ordinarios para convertirse en emprendedores y perseguir sus pasiones. Sin embargo, dar ese salto puede ser muy duro y lleno de incertidumbre. En estos puntos quiero contar algunas de las razones (al menos en mi experiencia) de por qué dejar un trabajo ordinario y apostar por uno mismo a corto plazo puede ser la clave para convertirse en un emprendedor a largo plazo.
Punto 1: La insatisfacción de lo ordinario. Muchos trabajos ordinarios ofrecen estabilidad y seguridad, pero a menudo carecen de la satisfacción y el sentido de propósito que muchos emprendedores anhelan, básicamente te caga ir a tu trabajo pero es lo que hay. Si te sientes estancado y sin motivación en tu trabajo actual, puede ser el momento de considerar tomar un riesgo y perseguir tus propias metas a largo plazo. Hace 14 años yo deje de ser gerente de un mugroso lugar de alitas para apostar por mi idea. Nadie me valido mi idea, fue una apuesta muy arriesgada pero sentía que no apostar por mi era más riesgo que permanecer en donde no quería estar.
Punto 2: La importancia de la visión a largo plazo. Ser emprendedor implica tener una visión a largo plazo y estar dispuesto a sacrificar la comodidad y la estabilidad inmediata por el potencial de crecimiento y éxito futuro. Al dejar un trabajo ordinario, estás apostando por ti mismo y tu capacidad para construir algo significativo y duradero en el largo plazo.
Punto 3: Rompiendo barreras mentales. Dejar un trabajo ordinario y emprender requiere superar barreras mentales y creencias limitantes. Cuando yo empece mi primer emprendimiento lo hice SOLO, yo cobraba, vendía, operaba y hasta hice solo googlenado el primer contrato para firmar a mis clientes. Muchas veces, el miedo al fracaso o la preocupación por la opinión de los demás pueden obstaculizar nuestro impulso de apostar por nosotros mismos, que te valga madre que piensa la gente, cree en ti y es todo lo que necesitas. Es importante recordar que cada éxito empresarial comienza con una apuesta y que los errores y fracasos son oportunidades de aprendizaje.
Punto 4: La oportunidad de desarrollar habilidades múltiples. Al embarcarte en el viaje emprendedor, tendrás la oportunidad de desarrollar una amplia gama de habilidades. A diferencia de un trabajo ordinario, donde a menudo estás limitado a un conjunto específico de tareas, como emprendedor tendrás que aprender a manejar aspectos de negocios como marketing, finanzas, ventas y más. Esto te brindará una experiencia valiosa y versátil que podría abrirte puertas en el futuro.
Punto 5: La búsqueda de la realización personal. El emprendimiento te brinda la oportunidad de perseguir tus pasiones y trabajar en algo que realmente te apasione. Al dejar un trabajo ordinario, estás tomando las riendas de tu vida y eligiendo seguir un camino que te brinde una mayor satisfacción y realización personal. La satisfacción de construir algo propio es algo que alimenta el cuerpo y el alma.