Nunca en mi vida he tenido un trampolín, para mi un trampolín es ese apoyo para estudiar, ese carro para empezar a moverte, ese soporte financiero hasta que te consolidas, ese dinero extra cuando haces una familia. Jamás los tuve.
Con un chingo de esfuerzo y mucho empeño termine la secundaria y la prepa desde entonces con mi dinero, mis medios, mis desveladas, mis reglas y mis formas.
Con un chingo de esfuerzo compre mi primer VW para poder trasladarme.
Con un chingo de esfuerzo y disciplina me fui de viaje para conocer más allá de mi ciudad y cultivarme.
Llegó mi primer hijo y con muchisisimo esfuerzo y reinventadome cada que fue necesario empecé a salir adelante, nunca nadie me dio ni medio peso para sortear mi situación a mis 22 años.
Con mucha inventiva y pasión me empecé a buscar nuevas oportunidades y cada que tenia una dejé todo para no desaprovecharla.
Con mucha constancia y curiosidad empecé a crecer y hacerme de cada vez una mejor calidad de vida, cada peso, cada cosa, cada kilómetro recorrido me lo gane yo con mis huevos mi sudor y mi deseo de siempre mejorar.
Un día la vida me quito a mi padre, nuevamente con mis medios solucione todo.
Y un día de la nada aparece el primer trampolín, una posible herencia y yo quede en shock. No sabía como reaccionar a un trampolín.
Un día de la nada llega alguien «cercano» y se lleva el trampolín. Se siente súper horrible pero no es un sentimiento nuevo, no es nuevo para alguien que va solo labrando su camino.
Go fuck yourself jamás he necesitado de un puto trampolín para nada.
Ya verán que con o sin trampolín voy a llegar a donde quiero llegar.
Move on!
